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lunes, 21 de julio de 2014

Correr,
asfixiarme por tanta pureza,
después quedarme quieta,
desacoplarme de las condiciones,
apartarme de mi encierro mental,
después desesperar,
buscarte,
y al rato encontrarte.
Saber decir que no,
aprender a no decir que si,
medir palabras,
poner en modo 'mute' a toda voz fastidiosa,
inhabilitar la capacidad para aborrecer,
equilibrar mis ideas con mis acciones,
hallar alguna posición que me quede cómoda,
dormirme con la lluvia.
Que todo lo que en mi imaginación queda,
todas esas ideas descabelladas a medias,
pasen al plano real.
Descomprimir,
desconectar mi pieza de mi casa,
ser yo en otro contexto,
no inhibirme.
Quizá esta noche lluviosa
amerite todo eso,
y mucho más.

3 comentarios:

  1. qué lindo asfixiarse pero de pureza

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  2. Quizás, en una noche lluviosa como la de ayer, más de uno haya rogado que nunca pare de llover, que se eternice ese momento de penumbra en la cama. Que la ciudad se calle un rato...

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  3. Saber decir que no,
    aprender a no decir que si

    parece tan simple y es tan complicado

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Cansada de remar donde no hay agua.