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lunes, 2 de diciembre de 2013

Precipicio personal.

 Parece que cae agua en el precipicio, aunque nadie lo crea. Son varias las gotas de agua que tardan en chocar contra el concreto de un subsuelo aparentemente eterno. Son fuertes, gruesas, complicadas de no sentir. El tacto las detecta, el precipicio las alberga, las toma como inquilinas, y así se inunda en forma completa. Así, el precipicio ya no es tan precipicio, no es tan hondo, no se destaca por su profundidad. Ya sabés dónde caerás: en agua pura que sostendrá tu cuerpo relajado. No habría que temerle más a un río, ¿no? No habría motivo. No estás tenso, por lo tanto, no hay lugar a donde puedas caer, ni hay forma de que te hundas. 
 Si supiste desplegar un precipicio mental y pudiste llenarlo con agua, éste deja de ser lo que era, no causa terror, ni la sensacion de pérdida de cordura, ni de que ésta posibilidad exista realmente. Algo te sostiene. Ya no sos un ente miedoso. Creo que llenar un agujero, de forma correcta, claro, es superar algo...puede que sea un miedo, un dolor, un viejo recuerdo que te perturbe hasta altas horas de la noche, un remordimiento gigantezco, una esperanza quebrada, lo que sea. 
 Y no es que el origen de este abismo signifique menos. El origen lo construíste vos, con tus manos, con tu mente, entregada y dedicada a una inquietud que se chupó millones de detalles, de positividades, de perspectivas. Nace, se gesta, existe, sale a la luz gracias a una única persona, y éste adquiere formas, requiere necesidades, demanda atención para molestar, permanece intacto siempre y cuando no lo llenes de agua.
 Podríamos llamar "precipicio" a un millón de problemáticas, a detalles inquietantes, a misterios  inconclusos, a pactos que no se cumplieron, a relaciones desgastadas, a una mente oxidada por golpes. Siempre y cuando sea más trascendente de lo que uno imagina, espera o cree, el abismo es un abismo, y se instala.
 ...Pero existe y termina. Lo importante es que encuentres el diluvio que llene un hueco de tamaño abismal y emocional. 

3 comentarios:

  1. Como siempre genial. Esta buena esa idea de dejarse caer como una gota al precipicio sabiendo que tal vez abajo no nos espere el caos, el estallido, sino una caída armoniosa y suave en un mar de personas como uno que lo están esperando con los brazos abiertos. Un flash hace mas o menos tres días escribí justo sobre esto (transmisión de pensamientos?:p ); "La delicadeza de una gota cayendo desde lo alto del cielo, o de una simple canilla. Puede transformarse en caos al estallar contra el gigante muerto, o puede acoplarse con armonía y formar parte de esa bestia dormida, todo depende del humor de los dioses..."
    Vos escribís siempre mejor. Besos.
    pd: lee "memorias del subsuelo" ; )

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  2. Muy linda entrada, y con una genialidad en lo complejo de las acciones cotidianas. Tal vez sea momento de dejarse caer sin importar lo que se encuentre abajo; da igual lo que nos espere, mientras nosotros esperemos lo mejor. Escribís muy lindo, besote.

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Cansada de remar donde no hay agua.