.


miércoles, 20 de abril de 2011

Estaba caminando en la playa, estaba mi familia, la que venía de parte de mi mamá. 
Mi tío, su esposa, mi prima, mi hermano, mi vieja, mi abuela, mi tía abuela y mi madrina, que es otra tía abuela.
Se instalaron todos y estaban bien. Mi madrina caminaba y estaba estable, renovada.  Estábamos todos felices. Aunque yo no. Me había apartado un poco y me puse a caminar por la playa, revolviendo la arena con mis pies. 


Era tiempo de despertar, y cuando me quise dar cuenta estaba tirada en el colchón del piso, dormida, escuchando un llanto. Me fuí despertando de a poco, y todavía inconsciente, le pregunté a mi mamá qué pasaba. Entre lágrimas me confesó que la tía murió por paro cardíaco.
Fué todo confuso, era como niebla que no me dejaba entender absolutamente nada. El llanto de mi mamá que se escuchaba y yo intentando entender la situación.
Me paré, y le dije a mi hermano "murió la tía, Sebastián". Reaccionó tarde, y cuando lo hizo se fué al living a consolar a mi vieja. A mí se me cayeron lágrimas de a poco. Ahí empecé a entender qué pasaba, aunque seguía totalmente aturdida y fuera de órbita.
El ambiente se tornó negro y triste. Y ahí me dí cuenta de que la tía Minga ya se había ido. Hoy se hizo de su ausencia algo eterno. Vivió y resistió todo lo que pudo, dió de ella todo, y aún así, entendiendo que era su hora y que otra cosa no se podía hacer, seguía odiando su muerte, seguía preguntándome porqué justo hoy, porque todo de golpe, porqué no pude despedirla como quería, porqué mi última imágen de ella fué en plena terapia intensiva dependiendo de un respirador artificial, porqué la última vez que la ví lúcida no se acordaba de mí y sólo me dijo "chau" como última palabra.
Qué loca que es la vida, que se lleva a la gente en los momentos menos esperados. Que triste... yo pensaba ir a verla mañana, ya que supuestamente había mejorado.
De todas maneras, ya llegó la hora y hoy se fué. Se fué con familiares que la adoran y con gente que la tiene en la memoria presente siempre. Se fué dejando a muchos llorando por su ausencia y siendo querida por todos. Se fué, dejándoles a todos los mejores momentos vividos con ella. Se fué marcándonos. Y se fué porque era su momento. Se fué sufriendo, pero ya pasó, ella está mejor. Su alma quizás estará por acá, o por otro lado. Quizás ya se encontró 
con mi abuelo y ahora están bien juntos.

Gracias tía, en éste poco año que viviste no te supe acompañar lo suficiente. Pero sabés que más allá de eso, te quería y te quiero. Creo que no me vine venir nada de ésto y daba por sentado que quizás vivirías un año más por lo menos. Pero más vale provechar las cosas hoy, si no sabés que puede pasar mañana. Gracias por resistir y por consentirme siempre. Gracias por ser mi madrina sin importar nada. Y perdoname por cualquier cosa que te haya molestado de mí. 
Hoy sé que los buenos momentos quedan en mi mente y mi corazón. Sé que la vida me arrebató a alguien muy importante, si bien ya era el momento, y sé que las cosas pasan, los finales son inesperados y que vos estás en un lugar mejor.
Espero algún día encontrarte; que vuelvas a visitar mis sueños y que me aclares que estás bien, donde sea que te encuentres.


1/09/1921-20/04/2011

4 comentarios:

  1. Uh, un bajón male, pero si se fue es porque esta buscando un nuevo camino, un lugar donde se sienta mejor :) y donde la acompañen todos los que ya nos dejaron antes.

    ResponderEliminar
  2. amiga lamento esto que comentas hoy, es un dia triste. cuenta con mi fuerza y cariño en este momento dificil.
    te dejo unos pasajes de la biblia que te pueden ayudar.

    Eclesiastes 9:5,6 y 10
    Juan 5:28,29

    Espero te sirvan de consuelo.

    Un gran abrazo y cariño.

    ResponderEliminar
  3. SE LO MERECE? PERO VOS TENES CONCIENCIA DE LO QUE DECIS?

    ResponderEliminar

Cansada de remar donde no hay agua.