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miércoles, 8 de diciembre de 2010

Y la cabeza se empieza a llenar de preguntas, de dudas. De cosas que todavía no se aclararon, y te preguntás qué estará haciendo, qué estará pensando, que estará sintiendo. Te preguntás como se está tomando la vida ahora que algo cambió. Querés saber si conoció a alguien, y si es así, a quién habrá sido. Querés saber todo y a la vez nada. No te interesa escuchar cosas que te duelan y a la vez sí. Y te desesperás, y esperás, con impaciencia y sin ganas. Esperás, porque otra no te queda. Y soñás todas las noches con su presencia por más irreal e improbable que sea. 
Que mierda che. Quiero llegar al viernes a la noche y chau desesperación. Pero igual voy tranqui che, porque la semana no se me pasó re lenta, y... no estoy re mal. Así que, inhalá, exhsalá, que el viernes ya llega.



3 comentarios:

  1. Tal cual:S me pasa exactamente lo mismo:(

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  3. Se lo que se siente! He llegado a entrar a su face para ver que esta todo privado.., No te preocupes de a poco empezamos a valorarnos y darnos cuenta que la vida sigue!
    Me gustan tus entradas, muy buenas =)
    Un beso grande y suerte!

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Cansada de remar donde no hay agua.