.


miércoles, 29 de septiembre de 2010

Romina.

Me cuesta empezar. Es muy complicado hablar de la muerte de alguien. Se sufre cuando se pierde a una persona. 
Ayer se fué Romina Yankelevich. Murió. Y apenas me enteré, no caía. No entendía. Creo que me negaba a creer que una persona tan buena, tan única se halla ido. Me pregunté millones de veces porqué ella. ¿Por qué?... si era tan joven. ¿Por qué?... si tenía toda una vida por delante. ¿Por qué?... si tenía hijos. ¿Por qué?...si no se lo merecía. ¿Por qué? ¿Cómo mierda es que una persona tan querida por todos desaparece de la nada sin previo aviso? La muerte es así, llega sin avisar, en el momento menos esperado y ataca a gente inimaginable. 
Sí, me dolió. Que se vaya una persona que marcó tanto me infancia me dolió. Por que la marcó de una manera increíble. Por que me transportaba a otro lugar cada vez que la veía en Chiquititas. Por que supo transmitirme una gran alegría.
Fué tan importante, y lo es todavía. Nos marcó a todos, pienso yo. Supo darnos cosas, sensaciones que nunca nadie nos dió. Fué una luz en el camino, quien nos sacaba a bailar con cada canción, quien siempre nos regalaba su sonrisa y a través de su talento nos regaló una ilusión incomparable.


Chau Romina. Supiste darnos cosas que nadie pudo. Marcaste un antes y un después.
Sos una de las mejores, sos única, sos un ángel.
Sé que siempre vás a estar en mi memoria, mi alma y mi corazón. Sé que estás en el de todos y que siempre vá a ser así. Sé que como vos no van a haber dos. Sé que los años no van a arrastrar tu recuerdo. Sé que fuiste magnifica. Sé que hay gente que nos supo brindar demasiado, y entre esas personas estas vos.
Gracias por tantos años de alegría, por tanta ilusión, por tus sonrisas y las nuestras, por cada tarde mirándote en Chiquititas, por tanta alegría, por una infancia tan linda. Gracias por ser parte de nosotros siempre. GRACIAS, de corazón.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cansada de remar donde no hay agua.